Las entrevistas son una de las herramientas más importantes para evaluar a los candidatos y tomar decisiones de contratación acertadas. Sin embargo, no todas las entrevistas son igualmente efectivas y a veces pueden ser engañosas o incompletas. Por eso, en este post te presentaremos las mejores técnicas para entrevistar candidatos.
Preparación Antes de empezar cualquier entrevista, es importante que te prepares adecuadamente. Esto significa conocer la empresa, el puesto, las habilidades necesarias y las responsabilidades asociadas. Además, debes tener claro cuál es el objetivo de la entrevista y cómo vas a evaluar a los candidatos.
Preguntas abiertas Las preguntas abiertas permiten al candidato hablar libremente sobre sus experiencias, habilidades y opiniones. Esto te ayudará a conocer mejor al candidato y a detectar posibles incongruencias o mentiras. Algunas preguntas abiertas pueden ser: “¿Cuéntame sobre un proyecto del que te sientas especialmente orgulloso?”, “¿Cómo describirías tus fortalezas y debilidades?” o “¿Cuál ha sido tu mayor desafío profesional y cómo lo has superado?”.
Preguntas situacionales Las preguntas situacionales te ayudarán a evaluar cómo el candidato maneja situaciones específicas. Por ejemplo, puedes preguntar: “¿Cómo te enfrentarías a un cliente insatisfecho?” o “¿Cómo resolverías un conflicto con un compañero de trabajo?”.
Preguntas conductuales Las preguntas conductuales se centran en la experiencia previa del candidato y cómo ha manejado situaciones específicas en el pasado. Por ejemplo, puedes preguntar: “¿Cuál ha sido tu mayor logro profesional y cómo lo lograste?” o “¿Cómo has manejado un equipo en el pasado?”.
Escucha activa Durante la entrevista, es importante que prestes atención a las respuestas del candidato y que hagas preguntas adicionales si es necesario. La escucha activa te permitirá detectar posibles incongruencias o malentendidos.
Observación del lenguaje corporal El lenguaje corporal puede proporcionar información valiosa sobre cómo se siente el candidato y cómo está respondiendo a las preguntas. Por ejemplo, una postura cerrada o mirar hacia abajo pueden indicar incomodidad o falta de confianza.
Evaluación de habilidades blandas Además de evaluar las habilidades técnicas, es importante evaluar las habilidades blandas del candidato, como la capacidad de trabajar en equipo, la comunicación efectiva y la adaptabilidad. Puedes hacer preguntas específicas para evaluar estas habilidades, como: “¿Cómo describirías tu estilo de trabajo en equipo?” o “¿Cómo te adaptas a los cambios en el entorno de trabajo?”.
Cierre de la entrevista Al final de la entrevista, es importante que cierres adecuadamente y que le des al candidato la oportunidad de hacer preguntas o aclaraciones. También debes informar al candidato sobre los próximos pasos del proceso de selección.
En conclusión, las entrevistas son una herramienta clave en el proceso de selección de candidatos. Con las técnicas adecuadas, puedes obtener información valiosa sobre los candidatos y tomar decisiones de contratación más informadas.
